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lunes, 31 de agosto de 2009

Los delfines rosados


Dentro de estos inteligentes animales, existen unas cuantas especies que son de agua dulce. A una de ellas pertenecen estos curiosos delfines que tienen un color rosado.

Viven en el Amazonas y en el Orinoco. Si os interesa verlos en vivo hay opciones de ecoturismo en Colombia que están siendo promocionadas últimamente.

Cuando el nivel del río sube han de vivir entre los árboles de la selva del Amazonas que quedan bajo el nivel del agua. Tienen una sorprendente adaptación al medio, ya que a diferencia de sus familiares marinos, no tienen las vértebras cervicales fundidas y esto les permite una amplia gama de movimientos en el cuello para poder esquivar los árboles.

Su color rosado varía de unos ejemplares a otros y también en un mismo ejemplar dependiendo de la edad del individuo. No se sabe a ciencia cierta a qué es debido este color ni porqué unos ejemplares son más rosados que otros. Se sabe que nacen grises y cuando envejecen vuelven a ser grises otra vez.

Estos animales están en peligro de extinción como ya le ocurrió a los delfines chinos que poblaban el Yang Tse.

El único depredador que tienen es el hombre y en el caso del delfín rosado por suerte en la amazonia peruana está mal visto matarlos porque existen leyendas en las que se les atribuye propiedades mágicas. Se cree que los delfines se convierten en hombres que enamoran a las muchachas y se las llevan por la noche para reproducirse con ellas. Incluso cuando un hijo es de padre desconocido dicen que es hijo de delfín.

Quizá gracias a la influencia de la mitología tarden un poco más en desaparecer, pero lo cierto es que la deforestación y la explotación sin escrúpulos de la selva está poniendo a estos bonitos animales en grave peligro.

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viernes, 28 de agosto de 2009

¿Los Simpson dejan de ser amarillos?


La imagen es de la promoción de la serie en Angola donde se va a emitir próximamente. No es que hayan hecho una nueva serie con esta nueva apariencia de los personajes, solamente es para la promoción. En los capítulos tendrán su aspecto habitual y su color amarillo de siempre.

Me encanta el nuevo peinado de Lisa y también la nueva decoración africana del salón. Y no me digáis que Bart no está auténtico con ese pelo…

Aprovecho el tema para proponer fiestuqui temática Simpson. A ver con qué me sorprendéis.

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jueves, 27 de agosto de 2009

Cuando todo se hace una montaña


He de decir que no estoy pasando por uno de los mejores momentos de mi vida. Son tantas y tantas cosas que ahora cada pequeña cosa me supone una montaña inexpugnable.

Esta mañana lo estaba pensando, es que me produce ansiedad hasta tener que ir a la óptica a por unas lentillas nuevas. No os riais, es la pura verdad. Hasta que no tenga mis lentillas nuevas bien adaptadas y viendo correctamente con ellas no voy a descansar a gusto.

El trabajo estos días no es un problema, las cosas están tranquilas, pero tengo problemas con un tema con RRHH y llevo días esperando una respuesta. Esto también me angustia.

Luego es llegar a casa y ver el panorama y me acabo de deprimir. Mi marido sigue triste, que es normal, pero además se encuentra cansado, le duele la espalda, le duelen las piernas, no se encuentra demasiado bien.

Todo esto me produce mucha angustia y la verdad es que hay momentos en los que sólo tengo ganas de llorar. Hoy es uno de esos días en los que me hartaría de llorar, pero no puedo, estoy en el trabajo y no voy a estar llorando como la Magdalena.

Me agobia todo, necesito algo que me de un poco de escape de esta situación y no lo encuentro. Imagino que el tiempo ayudará, pero a mí ya se me está haciendo largo.

La imagen es de 2.bp.blogspot.com

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miércoles, 26 de agosto de 2009

¡Cómo son nuestros peques!

De nuevo hoy toca ración de mamá con babero, es que se me cae la baba de ver las gracias de mi niño.

Las voy a contar aquí porque también esto me sirve a modo de diario para que cuando pase un tiempo pueda leer las cosas que mi niño hacía y recordarlas con cariño.

Ya os expliqué cómo es su forma de pedir comida, eso lo sigue haciendo, pide “ñanga, ñanga” en cuanto nos ve comer a nosotros o ve venir el plato de lejos o nos ve preparando la comida. También cuando compramos el pan, es irresistible la barra de pan para él. Hasta que no le damos un trozo no para.

Otra cosa curiosa que hace es que cuando va por la calle cada señora mayor que pasa por su lado y le dice algo es buena para darle la mano y que lo lleve de paseo. Me hace pasar vergüenza porque les da la mano a todas las yayas que ve para que lo lleven de la manita un trozo del paseo. Ellas siempre encantadas y diciendo qué simpático y que guapo es, pero yo pasando vergüenza por su descaro.

Lo mejor de todo es su obsesión o fascinación con los zapatos. Zapatería que ve se vuelve loco. Sabe decir zapatillas, dice “tatillas” o algo parecido. Se pone a señalar todos los zapatos de los estantes y a decir “tatilla”, “tatilla” y no se cansa nunca. Pero lo más divertido es que ahora le ha dado porque cuando ve un estante con zapatos, se sienta en el suelo, se descalza y se pone a intentar probárselos. Le da igual grandes que pequeños, él lo intenta.

El otro día lo hizo en El Corte Inglés y la gente se partía de risa de verlo. Bajamos del ascensor y justo delante de la puerta estaban las zapatillas de deporte de los uniformes de los colegios. Coincidió que había zapatillas pequeñas y no se lo pensó dos veces, a sentarse y probarlas. Toda la gente que salía de los ascensores lo señalaba diciendo: “mira qué hace el niño”.

En casa también anda con los zapatos siempre ocupado. Coge los nuestros, nos los trae para que nos los pongamos o intenta ponérselos él. También si estamos descalzos en el sofá y tenemos las zapatillas en el suelo él viene y nos las pone en los pies. ¡Más monooooo!

De verdad que son increíbles.

¿Qué cosas graciosas hacen vuestros peques? Espero vuestros comentarios.

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martes, 25 de agosto de 2009

Algo que ilusione

Últimamente me estoy dando cuenta de que necesito tener algo en la cabeza que me ilusione un poco. Pero ha de ser algo que organizar como un viaje o una escapada a algún sitio. De verdad que lo necesito.

Estos días ando mirando campings, sin saber si vamos a ir o no, ni tampoco cuándo en caso de que vayamos, pero al menos es algo que me anima y me ocupa el tiempo y me da una ilusión.

No quiero decir con esto que mi vida familiar no me ilusione, estoy encantada con mi niño y mi marido, pero como no llevamos una buena racha, hay veces que me agobio un poco. Mi marido anda triste y no se encuentra demasiado bien. El nene desde que volvimos de vacaciones está algo pesado, al principio no quería dormir, luego no quería comer… bueno, que es un poco difícil últimamente conseguir cosas con él.

Es por todo esto que necesito algo fuera de lo cotidiano que me de en qué pensar, en qué distraerme de las cosas diarias.

Pienso que al final no iremos de camping. Por un lado a mi marido no sé si le apetece. Por otro lado las fechas en las que me gustaría ir no me acaban de ir bien porque tengo que ir a logopedia y perdería clases. Si lo dejamos para más adelante, tampoco me parece bien porque ya no hará calor y yo lo que quería era un camping en la playa.

Así que no creo que vayamos, pero por lo menos ya digo que me he estado ilusionando con algo.

Si no vamos, lo que me gustaría sería coger vacaciones para El Pilar, una semanita. Me gustaría poder ir a Zaragoza a ver a mis amigas y ver el ambiente, que hace años que no lo hago.

Enfin, no quiero hacerme demasiadas ilusiones porque no sé si lo haremos. Ya os digo que mi marido está de que no sabe nada. Si le preguntas si quiere hacer tal o cual cosa siempre responde “no sé”.

Bueno, espero que el tiempo lo cure todo y las cosas vayan mejorando poco a poco.

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lunes, 24 de agosto de 2009

Día de playa, qué minivacaciones


Ayer pasamos un agradable día de playa los tres en familia. Madrugamos, porque para llegar a la playa que nos gusta y poder encontrar aparcamiento hay que llegar temprano.

Gracias al madrugón, lo conseguimos, llegamos a buena hora y encontramos sitio para aparcar. Como hay crisis y lo cierto es que ni cuando no había crisis éramos asiduos al chiringuito, así que ahí que fuimos con nuestra nevera y nuestra fiambrerita con comida dispuestos a pasar el día.

Mi marido, que es un cocinillas, hizo una crema de melón, riquísima, que en la playa fresquita nos cayó estupendamente. El nene comió crema de calabacín y un trozo de bocadillo de chorizo. Ya vuelve a sus comilonas de nuevo. La playa le dio hambre.

Bueno, dejemos la comida y volvamos a la playa. El agua estaba cristalina, no había casi olas y era estupendo darse un baño cada pocos minutos. Yo no soy de pasarme el día en el agua, pero si hace calor me gusta bañarme cada poco rato para irme refrescando.

Mi peque se bañó con su padre entre lloros. Tiene miedo y se agarra como un koala a los brazos para no caerse. Te aseguro que si lo sueltas tú, él no se cae de cómo se agarra.

Por lo demás lo pasó bien jugando con la arena y sentado en la orilla donde no llegaban las olas viendo el agua.

Yo estuve casi todo el tiempo a la sombra porque hacía demasiado calor. Menos mal que tenemos una sombrilla y un refugio. Siempre lo llevamos para tener más trozo de sombra para nosotros y sobre todo para el nene, que es de piel muy blanca y no queremos que se queme.

Disfrutamos un montón. Después de comer ya hacía bastante calor por lo que nos dimos el último baño y recogimos las cosas para irnos a casa. El peque estaba muerto de sueño, así que se pasó todo el camino de vuelta durmiendo como un bendito.

Para mí este día de playa ha sido como unas minivacaciones. Ya que no hemos disfrutado de vacaciones este año, al menos disfrutar de los días de calor que quedan aquí que tenemos la playa cerca y podemos hacerlo.

La foto es de la playa “El Cofete” de Fuerteventura, la he puesto porque me gusta y me recuerda vacaciones maravillosas de otros veranos mejores que este.

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viernes, 21 de agosto de 2009

Por fin viernes

Ya se termina la primera semana de trabajo tras las vacaciones. Por suerte ha sido bastante tranquila. Casi todo el mundo está aún de vacaciones y por eso no hay muchos problemas ni “marrones” urgentes.

Esta semana ha sido algo rara para mí. Por un lado la vuelta a la rutina pienso que me ha sentado bien, pero por otro veo que en casa las cosas todavía no han vuelto a la normalidad.

Mi marido sigue poniéndose triste por lo ocurrido, mi peque ahora resulta que no quiere comer, aunque ha mejorado en cuanto a lo de dormir.

Cuesta volver a la normalidad y más cuando has sufrido unas vacaciones como las que hemos tenido nosotros.

Este año ni siquiera he podido celebrar mi cumpleaños en condiciones. Compré unos pastelitos, pero nada más. ¿Cómo iba a celebrarlo con la que teníamos encima?

Ahora llega el fin de semana. A ver cómo transcurre. Espero que mi marido tenga ganas de hacer algo, de ir a la playa o algo que nos haga distraernos un poco.

Ya os contaré. Hoy no tengo muchas ganas de fiestuqui, pero no quiero romper la tradición porque es viernes y eso es lo que toca. Espero vuestras visitas.

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jueves, 20 de agosto de 2009

Revisión de los 18 meses

Como ya os adelanté, mi niño tenía el martes la revisión de los 18 meses en el pediatra. Hoy toca ración de baba caída de madre pesada.

Al peque ya se le ve que está sanote, es algo que salta a la vista porque es un niño muy grande y está muy fuerte. De todas formas, una madre nunca se queda tranquila del todo hasta que es el médico quien le dice que todo va bien.

La pediatra nos dijo que da gusto ver niños tan sanotes. Lo encontró perfectamente. Además de la revisión puramente médica, también se preocupan de su avance y aprendizaje. Nos preguntó si imitaba las cosas que hacíamos, lo hizo caminar descalzo para ver cómo lo hacía y de hablar ya no preguntó nada porque ya lo oía todo el rato. Es un charlatán, no calla en todo el rato.

La enfermera lo midió y pesó. Está enorme, pesa 13,650 Kg y mide 85 cm. Ha crecido 4 cm en tres meses y ha engordado un kilo.

También le pusieron la vacuna que tocaba. Lloró un poco, pero sólo en el momento del pinchazo. Se portó muy bien, pobrecito.

Está para comérselo, es un niño muy alegre, está siempre en movimiento y habla como una cotorra (aunque no siempre se le entienda lo que dice, jeje)

Es un “enamorabuelas”. Va por la calle y señora mayor que ve, ahí que va a decirle algo. Siempre obtiene respuesta, todas las abuelas se rinden a sus encantos: que si “que guapo que eres”, que si “que ojos más bonitos tienes”, que si “mira qué simpático es este niño”. Y él tan contento, claro. Eso es lo que le gusta, que le hagan caso.

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miércoles, 19 de agosto de 2009

Noticia: Es verano y hace calor



En todos los noticiarios televisivos está siendo la noticia estrella este verano. Señoras y señores, es verano y hace calor. Llenan minutos y minutos contando el calor que hace en los distintos lugares de España.

Yo me pregunto ¿dónde está la noticia? ¿No es normal que en verano haga calor? La noticia sería si hiciera frío ¿no os parece?

Sé que en invierno hacen lo mismo con las nevadas y las bajas temperaturas, pero parece que una gran nevada es noticia porque normalmente no nieva demasiado. ¿Pero el calor? Que me digan que es noticia que en Sevilla hay cerca de 40 grados o que en Zaragoza son las ocho de la tarde y hay 38... no es para nada raro.

Al principio me quejaba de esto en el telediario, porque era el que veía, pero estos días he visto noticias en otras cadenas y hacen exactamente lo mismo. Primero una ración de guerras, atentados y demás cosas sangrientas. Luego la ración de sucesos nacionales (más muertos por violencia) y después la noticia del año ¡¡hace calor!! Para finalizar el fútbol, claro está.

Desde luego que los noticiarios cada vez tienen menos que contar, se limitan a contarnos las desgracias que pasan en el mundo y luego a llenar el tiempo que les queda con tonterías sin importancia. Hace tiempo que me quejo de esto, los noticiarios no son lo que eran.

La imagen es de www.ecologiaverde.com

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martes, 18 de agosto de 2009

Vuelta a casa


Aunque siempre decimos que hay que romper con la rutina, que nos hace falta cambiar de aires, que viene bien un cambio, lo cierto es que la rutina es buena. Al menos a mi me hace sentir bien.

Cuando hay un cambio fuerte y doloroso en la vida, es reconfortante volver a la rutina. Eso es lo que yo necesitaba en estos momentos. Vuelta a mí casa, a mi trabajo, con mi niño y mi marido. Sin estar en casa de nadie, que estar en casa de otros, aunque sean tu familia no es lo mismo.

Para los niños también es buena la rutina. El peque se ha pasado las vacaciones descontrolado. No quería dormir, pillaba rabietas todos los días a la hora de ir a la cuna. Después se despertaba por la noche y lloraba.

Algunos días tampoco quería comer ¡con lo tragón que es! Imagino que notaba algo en nuestro estado de ánimo. También estaba con sus abuelos y sus tíos y se debía sentir el rey de la casa y se aprovechaba de eso.

Ha sido volver y parece que las cosas se han normalizado. La primera noche lloró bastante al ir a dormir. La segunda lloró menos y espero que en una noche o dos ya no llore nada.

El nene está muy guapo y grande. Ha aprendido palabras nuevas. Su palabra favorita es “CAIIIOOOO”, o su variante “HA CAIIIIOOOO”. Siempre tira las cosas al suelo y luego grita “caiiiooo”, vamos que se ha caído aunque lo haya tirado él.

Es lo primero que dice cuando se despierta y lo repite todo el día. Que hay fútbol en la tele, pues “caiiioooo” porque los futbolistas se caen. Que sale uno tirándose en una piscina… pues “caiiiooo” también. Que está jugando y se caen los juguetes (o los tira) también “caiiioooo”.

¡La cantidad de cosas que se caen a lo largo de un día es increíble! Uno no se da cuenta hasta que tiene a alguien que se lo dice cada vez que se cae algo.

Es muy divertido verle como progresa y empieza a hablar. También ha aprendido como se llama su prima y si le dices palabras a veces acierta a repetirlas. Lo que mejor dice es “agua” y las típicas “papá”, “mamá”, “tata”, etc ( y “caiiiooo”)

Esta tarde vamos a la revisión de los 18 meses. Espero que todo ande bien, al menos al peque se le ve fenomenal.

La foto es la única que he podido hacer de la naturaleza del Pirineo. En concreto es uno de los gladiolos que tiene mi madre en el huerto.

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lunes, 17 de agosto de 2009

Vacaciones sin descanso

Tal como prometí, hoy es 17 de Agosto y estoy de vuelta de mis vacaciones.

Por desgracia no traigo preciosas fotos ni bonitos relatos con los que daros envidia. Simplemente hemos pasado unas vacaciones horribles, con una desgracia tras otra y sin poder descansar sin tener un nuevo sobresalto.

No os explico los detalles porque no tengo ganas de recordar los malos momentos. Sólo os diré que desde el día 24 de Julio que mi suegra se cayó en la calle hasta el día 15 de Agosto que la enterramos, ha sido un ir y venir de viajes a Zaragoza al hospital.

Además el día 29 de Julio se cayó mi suegro en casa y el lunes siguiente falleció, por lo que hemos tenido dos entierros en diez días.

Estamos agotados tanto física como emocionalmente, han sido días muy duros y difíciles.

Se han ido los dos en muy pocos días, ahora estarán juntos si es que existe el cielo en el que ambos creían.

Descansen en paz.

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