¡Cómo son nuestros peques!
De nuevo hoy toca ración de mamá con babero, es que se me cae la baba de ver las gracias de mi niño.Las voy a contar aquí porque también esto me sirve a modo de diario para que cuando pase un tiempo pueda leer las cosas que mi niño hacía y recordarlas con cariño.
Ya os expliqué cómo es su forma de pedir comida, eso lo sigue haciendo, pide “ñanga, ñanga” en cuanto nos ve comer a nosotros o ve venir el plato de lejos o nos ve preparando la comida. También cuando compramos el pan, es irresistible la barra de pan para él. Hasta que no le damos un trozo no para.
Otra cosa curiosa que hace es que cuando va por la calle cada señora mayor que pasa por su lado y le dice algo es buena para darle la mano y que lo lleve de paseo. Me hace pasar vergüenza porque les da la mano a todas las yayas que ve para que lo lleven de la manita un trozo del paseo. Ellas siempre encantadas y diciendo qué simpático y que guapo es, pero yo pasando vergüenza por su descaro.
Lo mejor de todo es su obsesión o fascinación con los zapatos. Zapatería que ve se vuelve loco. Sabe decir zapatillas, dice “tatillas” o algo parecido. Se pone a señalar todos los zapatos de los estantes y a decir “tatilla”, “tatilla” y no se cansa nunca. Pero lo más divertido es que ahora le ha dado porque cuando ve un estante con zapatos, se sienta en el suelo, se descalza y se pone a intentar probárselos. Le da igual grandes que pequeños, él lo intenta.
El otro día lo hizo en El Corte Inglés y la gente se partía de risa de verlo. Bajamos del ascensor y justo delante de la puerta estaban las zapatillas de deporte de los uniformes de los colegios. Coincidió que había zapatillas pequeñas y no se lo pensó dos veces, a sentarse y probarlas. Toda la gente que salía de los ascensores lo señalaba diciendo: “mira qué hace el niño”.
En casa también anda con los zapatos siempre ocupado. Coge los nuestros, nos los trae para que nos los pongamos o intenta ponérselos él. También si estamos descalzos en el sofá y tenemos las zapatillas en el suelo él viene y nos las pone en los pies. ¡Más monooooo!
De verdad que son increíbles.
¿Qué cosas graciosas hacen vuestros peques? Espero vuestros comentarios.
Etiquetas: Personal: Ya está aquí mi peque
4 Comments:
Pues mi peque, la nena, ahora está como loca con los helados, así que cuando ve a alguien comiendo uno, se planta al lado con la boca abierta para que le den un poco.
También me lo hace cuando llego por las tardes y me como un sandwich, a la par que me dice que no ha merendado (mentira).
Ya no se va detrás de la gente, de la mano, pero sí que lleva tiempo con lo de los zapatos.
Lo más gracioso es cuando aparece con zapatos de su madre (con tacón) andando por el pasillo y sin caerse.
Y es que son tremendos, pero tremendos estos peques de hoy.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hola Carla!! me alegro de verte por el blog de Violeta.
JEJEJE...ya veo como se te cae la baba con tu pequeñin.
Esta lindo y graciosos, verdad que te dan ganas de comerselo?, pues cometelo que yo me arrepiento de no haberme comido al de 20 y al de 15,jeje.Así que en breve el proximo capitulo de Violeta sera ¡¡ME LA COMI!!, porque esta para eso.
Creo que no hace falta que te cuente sus gracias,puesto que sigues su blog.
BESOS Y SALUDOS PARA LA FAMILIA.
Manu, debe estar preciosa tu nena. A mi peque también le encanta el helado. Cuando como un cucurucho se lo acerco a la boca para que lo chupe un poquito y siempre pide más.
Con la merienda, comida o lo que sea siempre te pide que le des. Ahora que hago jornada intensiva y como cuando llego que es tarde y ellos ya han comido, siempre me viene a pedir "ñangañangaaa" JAJAJAJA
¡¡Hola Mili!! Ay, sí es verdad que me lo comería... ¡¡pero a besos!! De hecho me lo suelo comer a besos a diario. Esta edad es preciosa, me parto de risa con sus gracias.
Por cierto, que Violeta está muy guapa y muy mayor ya.
Muchos besos a tod@s
A ver si me inspiro hoy, no llevo buen día y eso que es temprano.
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